Sin el trabajo que hacéis, la labor de la Iglesia no iría bien, no se podría hacer tanto trabajo para la predicación del Evangelio, para ayudar a muchas personas, a los enfermos, a las escuelas, tantas cosas... Vosotros formáis parte de esta “cadena” que lleva adelante nuestra misión como Iglesia.
(Discurso a los empleados de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano, 21 de diciembre de 2017)