Francisco

papa-francesco.jpg
Francesco gesti piccolo.jpg
Vosotros formáis parte de esta “cadena” que lleva adelante nuestra misión como Iglesia

Sin el trabajo que hacéis, la labor de la Iglesia no iría bien, no se podría hacer tanto trabajo para la predicación del Evangelio, para ayudar a muchas personas, a los enfermos, a las escuelas, tantas cosas... Vosotros formáis parte de esta “cadena” que lleva adelante nuestra misión como Iglesia.

(Discurso a los empleados de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano, 21 de diciembre de 2017)

Preocuparse de corazón por la vida del otro

Hay que saber mirar las heridas humanas con el corazón para “preocuparse de corazón” por la vida del otro. De este modo, ya no es sólo un extraño necesitado de ayuda, sino, antes que nada, un hermano, un hermano que pide amor. Y sólo cuando nos preocupamos de corazón por alguien podemos responder a esta expectativa. Es la experiencia de la misericordia: miseri-cor-dare, dar el corazón a los míseros.

(Discurso a los socios del Círculo de San Pedro, 25 de septiembre de 2020)

Un corazón que vea y unas manos que actúen

A una situación excepcional no se puede dar una respuesta habitual, sino que se requiere una respuesta nueva, diferente. Para ello es necesario tener un corazón que sepa “ver” las heridas de la sociedad y manos creativas en la caridad activa. Un corazón que vea y unas manos que hagan. Estos dos elementos son importantes para que una acción caritativa sea siempre fecunda.

(Discurso a los socios del Círculo de San Pedro, 25 de septiembre de 2020

POCO O MUCHO, NO IMPORTA.
DONAR ES UNA ALEGRÍA